Canal M

A casi dos años de la publicación de Instantes decisivos [Bizarro, 2016], su álbum debut, Papina De Palma tira la casa por la ventana. El 1º de setiembre pondrá sobre las tablas Los abrazos, un espectáculo que dará que hablar (tomen nota) y que reúne canciones del repertorio de la artista. Es claro. Estarán las canciones de su primer disco, sí, pero habrá lugar para sorpresas e invitados. Muchos.

Es que el camino de Papina De Palma, en estos meses, ha sido de bajada de montaña rusa. Se ha colocado en escenarios que llamamos importantes (como si verla en un bar lleno de borrachos no fuera lo suficiente para conmover), viajó, tocó y se entreveró en la murga. Mucho. Tanto es así que, en 2018 salió en Falta y Resto y el próximo Carnaval pondrá su voz en tres conjuntos. Una pavada.

En esta edición de En Estudio, Papina De Palma habla de su presente y se asume como artista, tan uruguaya que le cuesta pagar las cuentas. "Mi vida sigue siendo muy parecida. Sigo sin tener un mango, sigo pidiendo plata prestada, bicicleteando de todos lados. Me va mucho mejor que antes de sacar el disco, pero a un nivel chiquito", dice.

Sobre Instantes decisivos apunta que no siente "que las canciones hayan crecido solas, sino que hay como una cuota de suerte, de tener el privilegio de tener la herramienta de internet y poder usarla a mi favor, pero también hay una cuota muy grande de laburo. De haber dejado de hacer otras cosas, de sacrificar de repente otros trabajos que no tienen que ver con cantar las canciones para dedicarme a full a eso, y creo que, afortunadamente, tuvo sus consecuencias. Las tiene permanentemente".

De su paso con Falta y Resto, dice, tomó la necesidad de "hablar de un amor no posesivo, de un amor que no es posesivo quizás tenga que ver con eso. Igual no siento necesario que las canciones se refieran a temas políticos, pero sí que haya una coherencia entre las cosas que pienso y quien soy, y las cosas que digo en las redes, que es algo superficial pero al final es re importante, y que tienen n alcance tremendo. Y que si hay algo en o que creo, y estoy convencida, tengo un poco la responsabilidad de decírselo a las personas que me escuchan [...] Sentiría irresponsable no hacerlo".