Canal M

Negar la importancia de La Trampa en la historia del rock local sería una tontería. Una de las pruebas, por si hacen falta, es que, tras un hiato de ocho años, el grupo volvió a presentarse en vivo -con el estreno de dos canciones- llenando cinco veces el Teatro de Verano en marzo de 2017. El registro de esos shows estará disponible en semanas en un DVD y álbum doble publicado por Bizarro Records.

Garo Arakelian, guitarrista fundador de la banda, publicó, en 2012, Un mundo sin gloria [Bizarro], un trabajo denso, de canciones reflexivas y alejadas de los lugares comunes del rock. En 2016, además, salió a la calle Sesiones [Bizarro], primer trabajo discográfico de El Astillero, un trío de cantautores que integra junto a Gonzalo Deniz y Diego Presa.

En esta edición de En Estudio, Garo Arakelian habla sobre el presente y el futuro de La Trampa, y se muestra convencido de lograr "volver a tener un vínculo sensato con el terreno que la sustenta, con la gente, con la propia historia del grupo".

"La Trampa sigue. Estamos siguiendo. Para mí esto es el efecto Doppler de lo anterior. Los Teatro de Verano fueron el efecto Doppler de la no existencia, de la no presencia, y eso fue fundamental para el regreso. La banda fue lo que pasó en estos cinco Teatro de Verano porque estuvo ausente. Lo sensato es reconocer que eso decae. Necesitás generar obra, tenés que tener tus canciones de hoy", explica Garo. Este mes, La Trampa se presentará el 13 de octubre en el Parque Rodó de Minas, y el 28 de octubre será uno de los números centrales del Durazno Rock, en el Parque de la Hispanidad.

En la charla, Garo Arakelian aborda el resultado del libro La Trampa. Sin miedo a la oscuridad [Fin de Siglo, 2017], de Ignacio E. Martínez, y habla del vínculo con la creación, la sensibilidad, y el respeto por el público que sigue sus proyectos. "Al público lo respeto no considerando lo que el público quiere. Hay artistas populares a los que se los contrata para las Bodas de Plata, y tocan los temas que la gente quiere escuchar. No es mi rol", dice.

Sobre El Astillero, con el que está preparando un nuevo disco de canciones nuevas, señala que "el ego es un motor que tiene que ver con la confianza, con la certeza de que no hay nada en el mundo que te diga que vos no. ¿De dónde sacás esa fuerza? [...] Nunca, en todas las crisis que he visto vinculadas a los egos vi algo tan productivo como esto que estoy viviendo con ellos. Tiene mucho que ver con la confianza y con el respeto por el otro. El ego también es un perro. Nace cuando puede. El ego destructor, el ego que te aleja del motor".

"El odio por lo popular se ha instalado dentro del ambiente rockero en varias de sus supuestas jerarquías. Detrás del odio por lo popular está el odio por la gente. Misantropía y cosas por el estilo pueden ser palabras muy elegantes, pero es difícil suponer, manteniendo la ilusión de que sos medianamente inteligente, que te va a ir bien detestando a la gente", dice, en otro momento de la charla.