En estudio

Felipe Polleri: “Tengo la esperanza de molestar. Me parece que es la función de un escritor”

“A veces me impresiona lo que escribo […] Se ve que en el proceso de la escritura aparecen las partes más oscuras”.
25.05.2018
2018-05-25T00:23:00

Más de En estudio

Felipe Polleri publicó, hace algunas semanas, Los teléfonos de papel [Hum, 2018] una novela anárquica y, cómo no, aterradora. En ella, un dramaturgo monstruoso, fundador del Teatro de la Locura, lanza sus diatribas contra la familia, la literatura, la humanidad, con ferocidad y negrísimo sentido del humor.

Polleri dice que este es "un libro bastante amargo, pesimista", y que no podría ser de otra manera. "Como especie somos bastante fracasados. Esto no se puede medir históricamente [...] pero no hemos funcionado muy bien. Mirá lo que es el mundo... Guerras constantemente, hambre, son cosas que podríamos solucionar, y hay interés en no solucionarlas. La codicia, lo de siempre. Y tenemos un mundo que es bastante terrible, y no es el mundo, es también nuestro país [...] Acá entraríamos con el tema del capitalismo, pero entraríamos también con el tema de la naturaleza humana. A veces me pregunto si el capitalismo y la naturaleza humana no son dos sistemas que se llevan bien. Me dijeron que este libro era medio misantrópico. Puede ser, pero eso es lo que uno siente", dice.

En esta edición de En Estudio, el autor habla de su forma de escribir, de cómo deja que su inconsciente forme parte de la obra y de que no lo importa -más bien no quiere- agradar a los lectores. "Nunca mi objetivo fue ser agradable, sino contar mi experiencia. Transmitirla, pero no de forma ejemplar, sino todo lo contrario. Soy un ser humano, con todos los defectos que cabe tener, y esa experiencia, desde el arte se transmite, y el resultado es el que sea".

"La corrección política se está comiendo todo. Es un tema que me cansa mucho. Me parece barato. Esa cosa de agarrar un discurso, que es el discurso de todos y repetirlo como un loro. Ahora está el tema de las mujeres..., el que sea. Solucionemos las cosas comportándonos como debemos, no haciendo versos... Por supuesto que sí, pero no utilices eso para ganar votos [...] No podríamos leer nada con ese criterio, porque la literatura es el territorio de la libertad. Si no es eso, no es nada. Ahí vos te descargás. Siempre tiene que tener un contenido estético, si no es pura catarsis, y a mí el contenido estético me importa mucho. Que mis libros sean hermosos. No agradables: sumamente desagradables tal vez, pero que desde el punto de vista estético sean hermosos es una cosa que me importa mucho", dice en otro momento de la charla.

Canal M para móviles

Disponible para iOS y Android