Canal M

Matías Chapore, un joven de La Paloma, tenía 28 años cuando desapareció. El 21 de abril de 2016 se tomó un ómnibus rumbo a Colonia y jamás llegó.

"Se fue como se iba casi todos los meses a ver al hijo. Me dijo que se llevaba unos alfajores y algo de tomar para el viaje", contó su madre, Esther Lujambio. "Eran dos o tres días y él volvía", agregó.

"Casi siempre me llamaba y me decía que le hiciera un giro así volvía", remarcó. Esther contó que en este caso sucedió lo mismo. Matías la llamó y le pidió que enviara plata. Ella fue a Abitab, pero se dio cuenta de que le faltaba un número en los datos que le mandó su hijo. Lo llamó para corroborarlo y nunca más le atendió.

Fue visto por última vez cuando tomó el ómnibus en La Paloma. "Ninguna persona lo vio, ninguno de los que nos conoce, ni un mensaje, nada", agregó.

A los pocos días de haber denunciado su desaparición, el comercio de la familia recibió un disparo. El hermano de Matías, Alexis, no sabe si eso pudo tener vínculos con el destino del joven y la policía no logró establecerlo.

Esther contó que los primeros 15 días las autoridades iban todos los días a su casa, pero luego nunca más se comunicaron. "Queremos que se siga investigando, que se sepa algo sobre lo que pasó", dijo Alexis.

La madre explicó que a las tres de la mañana ya no puede seguir durmiendo, y que enciende la tele y se pone a tomar mate, esperando que llegue su hijo. "Quiero verlo aunque sea una última vez, porque él se fue bien de mi casa; que me digan lo que pasó con él, dónde está, porque no hay derecho a que una madre no sepa dónde está su hijo", concluyó.